Solemos subestimar el poder de un abrazo. No les damos la importancia que merecen. Personalmente, opino que pocas cosas reconfortan más que un abrazo largo y cálido. Y es que, como se suele decir, “los abrazos son curativos”. Prueba de ello es la increíble historia de las gemelas Jackson.
Índice
El poder de un abrazo
Brielle y Kyrie Jackson nacieron, en octubre de 1995, con tan solo seis meses de gestación, doce semanas antes de lo previsto. Su estado era muy débil, por lo que necesitaron asistencia médica.
Para evitar infecciones por contacto entre las dos bebés, ambas fueron puestas en incubadoras diferentes. Varios días después, mientras Kyrie iba recuperando peso y fortaleciéndose, la salud de Brielle no mejoraba. Tenía problemas respiratorios que provocaron que su piel se volviera de un tono azulado. Su ritmo cardíaco estaba demasiado acelerado. Su familia se esperaba lo peor.
Ocurre el milagro
La situación era desesperada, el tratamiento convencional había fallado y la pequeña se encontraba en estado crítico. Fue entonces cuando, desafiando el protocolo del hospital, la enfermera Gayle Kasparian propuso meter a las hermanas en la misma incubadora.
El resultado fue asombroso: a pesar de las escasas fuerzas que tenía, Kyrie fue capaz de poner su brazo izquierdo sobre el cuerpo de su hermana. Esto estabilizó el pulso de Brielle, aumentó sus niveles de oxígeno y normalizó su temperatura. Las gemelas lograron recuperarse.
Este “abrazo del rescate” (rescue hug, en inglés) es una prueba de la potencia de la conexión humana. Desde entonces, los médicos continuaron la práctica de poner en la misma incubadora a bebés prematuros, como parte de la terapia para su recuperación.
El Experimento de Harlow
Con su estudio, el investigador Harry Harlow demostró que los bebés de mono anteponían el contacto físico a su propio alimento. Lo mismo ocurre con bebés humanos: los hijos de madres que acarician frecuentemente a sus bebés tienen menos probabilidades de enfermar que los hijos de madres poco afectuosas.
Tampoco te sorprenderás si te digo que, en los hogares donde no se trata de forma afectuosa a los niños, estos tienen una mayor tendencia a la violencia en la edad adulta. La mayoría de casos de pederastia, violaciones y asesinatos vienen precedidos de infancias difíciles, donde primaban el rechazo, la soledad y la ausencia de contacto físico y cariño con otras personas.
El contacto físico como forma de terapia
Se ha comprobado que acariciar animales como perros, gatos o delfines es un método muy efectivo para tratar pacientes con depresión, autismo y otras dolencias psíquicas.
Las mujeres son más sensibles
La piel es el órgano más grande del cuerpo humano (sí, también es un órgano, como el corazón o los pulmones). Ocupa una superficie aproximada de dos metros cuadrados, por los cuales se distribuyen unos 2.800.000 sensores de dolor (500.000 detectan el tacto y el peso y 200.000 el frío).La piel femenina es diez veces más sensible al tacto que la de los hombres, además de mucho más fina. Como ya hemos mencionado en este blog, las mujeres poseen mayores cantidades de oxitocina, la hormona que provoca la necesidad de tocar y ser tocado.
Los hombres y el dolor
La piel masculina es más gruesa, motivo por el que los hombres tienen menos arrugas.
Un niño perderá su sensibilidad al tacto casi por completo al llegar a la adolescencia, cuando su cuerpo se empieza a adecuar para la práctica de la caza. El hombre cazador necesitaba no sentir nada cuando corría entre zarzas y luchaba contra sus enemigos, evitando así caer doblegado de dolor.
Cuando un hombre se concentra en la práctica de una actividad física o deportiva, es muy difícil que perciba el sufrimiento. Esto explica que veamos boxeadores seguir en pie y peleando como si nada mientras su rostro está desfigurado y sangrando, debido a los golpes recibidos.
Me viene a la mente una situación real en un partido de fútbol del FC Barcelona, varios años atrás. Su capitán, Carles Puyol, en un choque fortuito, recibió un golpe en la cabeza que le causó una herida sangrante. En la misma banda, le graparon la cabeza cuatro veces, sin ningún tipo de anestesia. 5 minutos después, estaba jugando de nuevo. Tremendo.
Me pusieron 4 grapas en el campo y 2 puntos en el vestuario, pero lo que más duele es el resultado» dijo tras la derrota de su equipo.
La cosa cambia cuando no hay actividades físicas de por medio. En estos casos, la resistencia de la mujer es mucho mayor.
Una mujer dirá que “está bien” con 40º de fiebre, doblada de dolor y sin poder respirar, mientras un hombre simula estar en su lecho de muerte, pide que avisen a su madre y pregunta por su testamento teniendo un leve resfriado.
Hombres y mujeres frente al estrés
Los hombres, por lo general, cuando se ven sometidos a situaciones de gran presión, prefieren aislarse. Se encierran en su mundo y piensan en silencio.
Una mujer, en cambio, buscará consuelo entre los brazos de su pareja o amigas.
Si una mujer te grita ¡no me toques!, es un claro indicio de que está muy disgustada. Para ellas el contacto físico supone una conexión emocional muy potente, por lo que, si están enfadadas con alguien, lo lógico es que quieran romper esa conexión.
Cuando veas a una mujer preocupada, abrázala. No esperes a que te lo pida. Se sentirá aliviada y agradecida al mismo tiempo.
Esto para ellas no es ningún secreto, ya que están preparadas biológicamente para detectar cualquier cambio en la conducta de las personas de su alrededor. Sin embargo, para que un hombre se dé cuenta de que otra persona está mal, necesita ver síntomas muy evidentes, como lágrimas o sollozos.
Que no te pase esto a ti. Demuéstrale que estás ahí, que la entiendes y que la apoyas.
Conclusiones
Abraza. Abraza a tus hijos, a tu pareja, a tus padres. Abraza a tus hermanos, a tus tíos, a tus abuelos. No entres ni te vayas de casa sin dar un abrazo y un beso a los tuyos. Establecerás un vínculo inquebrantable con ellos y tus relaciones se verán tremendamente favorecidas y beneficiadas.
A nadie le amarga un dulce. Tampoco un gesto de cariño.
Tu turno: y tú, ¿conocías el poder de un abrazo? ¿Abrazas lo suficiente a tu familia? Te animo encarecidamente a hacerlo a partir de ahora, y a que nos cuentes cómo te sientes y qué consecuencias tiene este cambio en tu vida. Y si ya lo haces, ¿qué significa para ti hacerlo?
Me ha gustado mucho este post.
Sinceramente no soy de las personas que abracen constantemente, aunque con el paso del tiempo vas creciendo y separándote poco a poco del lecho y notas que sí hace falta ese contacto físico que hasta entonces no has tenido con tus seres queridos.
Aunque me cueste, creo que es buena idea demostrar más. Ya te contaré…
Esperamos el siguiente!
Inténtalo, ya verás como consigues sacarles una sonrisa y te sientes mucho mejor por ello.
Espero a que me cuentes, eh?
Pero ojo, que por no ser cariñosa no todo el mundo salimos delincuentes!
Por supuesto que no, hablamos de infancias difíciles, no de ser o no cariñoso. Y ni tan siquiera todos estos casos se acaban torciendo; lo que digo es que la mayoría de los casos de violaciones y asesinatos vienen precedidos de situaciones de acoso, soledad y falta de cariño.
La diferencia es notable 🙂
Ayyyyyyyyy!!!! Como me gusta leer esto, me encanta achuchar y q me achuchen, hay veces q pienso q alomejor me paso con mi hijo o mis sobrinos ya mayores, pero veo q no es así, seguiré achuchando con mucho gusto, me encanta!!!
El amor es de las pocas cosas que nunca sobran, así que no te preocupes y sigue haciéndolo!
🙂
Que bonito!!y que verdad más absoluta, que importante es abrazar a la gente que quieres y como reconforta.Desde sevilla te mando un grandísimo abrazo .
Un lunes más ,me ha encantado.
Gracias Ana! abrazo y súper achuchón también para ti!
Muy cierto esto que dices. Yo necesito abrazar, deseo abrazar y achuchar a la gente y que me abracen a mi. En mi casa siempre nos hemos abrazado, besado, dado y recibido cariño de muchas formas y no entiendo la vida de otra forma. Respecto al dolor y la sensibilidad no sabría que decir. Siempre. Se ha dicho que a los hombres siempre les duele todo mucho mas pero en situaciones extremas son más duros por «brutos»
No puedo estar más de acuerdo, yo veo la vida como tú. Sin cariño, nada sería igual.
Ahora ya sabes que no es así por brutos, sino por evolución 🙂
Abrazotes!
Que gran verdad, me ha gustado mucho este post especialmente porque el amor y el cariño es lo mejor que tenemos, aunque a veces no nos demos cuenta…
Hace unos días, mientras trabajaba, me sorprendió una clienta con un súper abrazo, lejos de molestarme le correspondí y ella incluso llegó a preguntarme si me había molestado, por supuesto le dije que no, y me besó aún con más ganas, que bonito es demostrar cariño, y que valoren tu trabajo de esta manera ?
Y cuando menos te esperas el abrazo, más te acaba gustando verdad? prueba a dárselo a tus amigos y ya verás los resultados!
el contacto humano es primordial. une a la gente
Así es Miguel Ángel, es la forma de conexión más potente que existe.
Abrazo grande y muchas gracias por dejar tu comentario!